Al girarme después de cerrar la puerta mis padres me estaban mirando con expresión interrogativa. ¿Que les iba a decir? ¿Nate y Jacob estaban enamorados de mi y por eso se peleaban en la puerta de mi casa? Estaba claro que eso no se lo podía decir. También habían escuchado cuando Jacob había dicho que me había besado a la fuerza. Eso me complicaba las cosas bastante.
¿Se puede saber que pasaba ahí fuera? -Pregunto mi padre histérico.
Improvise rápidamente.
Se han peleado.
¿Y que tiene que ver esto contigo? -Preguntó mi madre.
Los vi en la playa que estaban apunto de pegarse y los separé.
Fue una explicación muy corta pero fue todo lo que pude improvisar. Por suerte no se fijaron como llevaba de sucio el vestido. Me dejaron estar aunque no parecían muy convencidos de mi explicación. Tendría que avisar a Jacob y Nate para avisarlos de que si mis padres les preguntaban no la fastidiaran. Pero bien pensado, era verdad que se habían peleado solo haría falta que se inventaran unos cuantos detalles. Me fui a mi habitación rápidamente sin cenar, no quería mas interrogatorios. Ultimamente no estaba comiendo nada esta costumbre se tenia que acabar. Mañana iba a ser un día complicado pero ahora no valía la pena mal gastar tiempo pensando en mañana. Era mas importante pensar en Jacob. Yo también le gustaba! No me lo podía creer. Hacía mucho que no leía, decidí coger mi libro favorito. No es que fuera muy aficionada a leer, pero ese libro me gustaba mucho. El prólogo empezaba así:
"Estoy harta de tomarme la vida como una persona adulta. Quiero volver a ser niña, una niña de seis años que se ha caído de la bici. Quiero hacer muecas, gritar muy alto y correr berreando hasta la cocina, donde mi madre me abrazaría fuerte y me daría un beso en el rasguño de la rodilla para que se curase. Entonces dejaría de llorar y me bebería a sorbos un colacao hasta que se me pasara el dolor. Es una desventaja de hacerse mayor: tienes que aprender a sobrellevar esos dolores pues no se arreglan con un beso."
Era curioso, acababa de leer lo que llevaba pensando estos últimos días. Estaba confundida, para ser sinceros muy confundida. Mi vida estos últimos días estaban siendo desastrosos. Me quede dormida pensando en Jacob mientras unas lágrimas silenciosas recorrían mi cara.